Las instalaciones eléctricas en sectores como la industria y la minería presentan condiciones muy exigentes. Equipos de gran potencia, entornos con alta humedad, polvo, vibraciones constantes o riesgo de explosión son solo algunos de los factores que convierten a estas instalaciones en un verdadero reto técnico.
En este contexto, garantizar la seguridad eléctrica no es solo una buena práctica: es una necesidad crítica y en este artículo vamos a ver cómo hacerlo.
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Principales riesgos eléctricos en la industria y la minería
Las instalaciones eléctricas en entornos industriales y mineros están expuestas a numerosos factores que aumentan el riesgo de fallos, accidentes e interrupciones operativas. Conocer estos riesgos es el primer paso para prevenirlos de forma eficaz:
- Sobrecargas y cortocircuitos
La presencia de maquinaria pesada y líneas de alta potencia hace que las sobrecargas sean un riesgo habitual. Si no se cuenta con protecciones adecuadas, una sobrecarga puede derivar en cortocircuitos, daños en equipos o incluso incendios.
- Contactos directos e indirectos
El contacto directo con partes activas (como conductores sin aislamiento) o indirecto (por ejemplo, a través de una carcasa metálica con tensión) puede causar descargas eléctricas graves o fatales. Una correcta puesta a tierra, protecciones diferenciales y un diseño seguro son esenciales.
- Condiciones extremas del entorno
En muchos entornos industriales y, sobre todo, en minería, las condiciones ambientales suponen un riesgo adicional:- Humedad → puede provocar cortocircuitos o corrosión en los conductores.
- Polvo en suspensión → reduce la vida útil de los equipos y afecta a la disipación del calor.
- Gases explosivos o inflamables → requieren equipos con certificación ATEX para evitar chispas accidentales.
- Vibraciones constantes → pueden aflojar conexiones eléctricas y comprometer la seguridad.
- Instalaciones obsoletas o mal dimensionadas
En muchos casos, las instalaciones eléctricas no han evolucionado al ritmo de la maquinaria o los procesos. El uso de materiales anticuados o la falta de revisión de la capacidad de carga puede generar fallos recurrentes, pérdidas de eficiencia e incluso situaciones de riesgo eléctrico permanente.
Prevenir estos riesgos no es solo una cuestión técnica, sino una responsabilidad operativa y legal. Elegir los materiales adecuados, respetar la normativa y realizar un mantenimiento regular puede marcar la diferencia entre una instalación segura y una potencial fuente de problemas.
¿Por qué importa usar productos certificados?
En instalaciones eléctricas industriales y mineras, no todo vale. Usar materiales certificados y homologados es clave para garantizar la seguridad y el cumplimiento normativo.
Un producto certificado ha pasado pruebas exigentes. Cumple con los estándares técnicos y está preparado para funcionar en condiciones reales, incluso en entornos extremos.
Estas son las razones por las que deberías exigir siempre materiales certificados:
- Funcionamiento seguro y duradero. Reducen fallos, averías y paradas no planificadas.
- Cumplimiento legal. Evitan sanciones por parte de la administración o las autoridades competentes.
- Auditorías sin sorpresas. Facilitan pasar inspecciones técnicas, tanto internas como externas.
- Seguridad laboral. Protegen a los trabajadores frente a riesgos eléctricos.
- Confianza y reputación. Hablan bien de tu empresa ante clientes, proveedores y organismos oficiales.
Invertir en calidad no es un gasto. Es una garantía para el presente y el futuro de cualquier instalación crítica.
Soluciones y componentes para una instalación segura
Diseñar una instalación eléctrica segura en entornos industriales o mineros requiere más que una buena planificación. Es fundamental elegir componentes adecuados, que resistan las condiciones del entorno y cumplan con las exigencias normativas.
- Materiales resistentes y adaptados al entorno
Las condiciones de trabajo extremas requieren productos robustos y duraderos. Algunos elementos clave son:
- Cajas estancas con protección IP65 o superior, ideales para ambientes húmedos o polvorientos.
- Armarios industriales reforzados, con ventilación controlada y resistentes a la corrosión.
- Cableado con recubrimientos especiales, que soporten altas temperaturas, abrasión, aceites o agentes químicos.
- Protección activa frente a fallos eléctricos
Instalar elementos de protección es obligatorio para evitar sobrecargas, cortocircuitos y riesgos eléctricos. Los más importantes:- Interruptores diferenciales, que desconectan el circuito en caso de fuga de corriente.
- Magnetotérmicos, para proteger frente a sobreintensidades y cortocircuitos.
- Analizadores de red, que detectan desequilibrios, armónicos y fallos en el suministro.
- Sistemas de monitorización, para controlar en tiempo real el estado de la instalación y anticiparse a fallos.
- Tecnología ATEX en zonas clasificadas
En entornos con riesgo de explosión (presencia de gases, vapores o polvo inflamable), es obligatorio utilizar equipos certificados según normativa ATEX.
Esto incluye:- Envolventes especiales.
- Conexiones y canalizaciones protegidas.
- Luminarias y dispositivos eléctricos preparados para evitar chispas o sobrecalentamientos.
- Iluminación segura para entornos industriales y mineros.
La iluminación también debe estar pensada para resistir. Es clave elegir:- Campanas LED industriales con protección IP y resistencia a impactos.
- Pantallas estancas, ideales para túneles, almacenes, talleres o espacios con alta humedad.
- Iluminación ATEX, en zonas clasificadas con riesgo de explosión.
En Maprise contamos con un amplio catálogo de materiales eléctricos y soluciones específicas para entornos industriales y mineros.
Trabajamos solo con fabricantes de confianza y productos certificados, para ayudarte a diseñar instalaciones seguras, eficientes y duraderas.
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